Philippe Duboscq
Como un atrezo - Poema a ocho manos
El cadáver quedó tendido como
Un atrezo en el decorado
Un código impreciso rayaba la pared
Dentellada de cocodrilo, rojos machetes
Ninguna forma clarificaba el crimen. Sin pistas.
Pero el olor, dulzón y antiguo, se enredaba
En mis entrañas.
¿Quién fue? ¿De dónde vino?
¿Acaso el blanco teme al rojo?
¡No! Tiñe de púrpura el alma
¿Acaso nunca fue blanca?
Y espolvoreó de destellos fugaces
El rostro del perecido en la arena parado.
Creo recordar… mi mano temblaba,
Tiró la navaja, escondió la rabia
Y firmó de sus dientes afilados
Rasgando en su sangre murales desfigurados
Acabando con la esperanza de unos mártires
Muertos sin saber aún
Por qué.
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