Fotografía: “Haití, 34 segundos después” en CaixaForum Barcelona

El 12 de enero de 2010, la tierra tembló violentamente durante 34 segundos en Haití, uno de los países más pobres del mundo.

El terremoto, que puso fin a la vida de 220.000 personas y dejó a 2.500.000 haitianos sin hogar, dio paso a una de las emergencias humanitarias más complejas de los últimos años. El colapso de las instituciones locales y la devastación provocada por el seísmo movilizaron rápidamente la ayuda internacional y la solidaridad de la ciudadanía, que se volcó en un país que todavía hoy continúa en estado de emergencia humanitaria. Con el objetivo de que no se olvide la grave situación que sufren los haitianos, la Obra Social ”la Caixa” presenta Haití, 34 segundos después, un extenso recorrido por el terremoto y sus consecuencias. Y todo, a través de las fotografías de Emilio Morenatti y Marta Ramoneda; documentales de Oriol Gispert; un módulo interactivo que introduce la muestra y recrea los segundos del terremoto y un repaso por los proyectos de rehabilitación que Intermón Oxfam, Médicos Sin Fronteras, Cruz Roja, UNICEF y Cáritas han puesto en marcha con el apoyo de la Obra Social ”la Caixa” y las donaciones solidarias de los ciudadanos de todo el estado.

La muestra se puede visitar en CaixaForum Barcelona del 23 de marzo al 12 de junio de 2011. Posteriormente viajará a CaixaForum Madrid, donde se exhibirá del 30 de junio al 2 de octubre.

La muestra se divide en cinco ámbitos distribuidos en tres espacios de CaixaForum Barcelona, y hace un recorrido de la Haití anterior y posterior a la catástrofe, incluyendo desde un simulador de terremoto hasta una aproximación a la situación sobre el terreno a través de las fotografías y documentales, pasando por un repaso de destacados proyectos de reconstrucción.

Haití, un país vulnerable (entrada Sala 1)
Haití es uno de los países más pobres de la América Latina. Cerca del 80% de la población vive en condiciones de pobreza extrema y más de la mitad de los haitianos sobrevive con menos de un dólar al día. La esperanza de vida a penas supera los 60 años, el desempleo se ha generalizado y la economía agrícola e informal constituye la base productiva. Las tasas de analfabetismo son alarmantes: se calcula que la mitad de la población no sabe ni leer ni escribir. Las infraestructuras y los servicios sanitarios dependen desde hace años de las organizaciones internacionales públicas y privadas y de las ONG.

Los haitianos se encuentran en una situación de crisis humanitaria permanente que les ha impedido la estabilidad necesaria para generar procesos de cambio social y desarrollo económico. En este sentido, el terremoto que sacudió el país en el año 2010 no hizo sino agravar seriamente lo que ya era una crisis crónica.

El terremoto (Sala 1)
12 de enero de 2010, 16:53 horas. Un terremoto de 7 grados en la escala de Richter, con
el epicentro a 17 quilómetros de la capital de Haití, Puerto Príncipe, sacude a todo el país.
Las ciudades de Jacmel, Léogâne y Gressier son, junto con el devastado Puerto Príncipe,
las zonas más afectadas.

Minutos después del terremoto, el caos y la confusión se apoderan de las calles de Haití. En la capital, las instituciones encargadas de gestionar el desastre se colapsan. Quedan destruidos el 60% de los edificios administrativos, los edificios del gobierno y las principales infraestructuras de la capital, entre las cuales está la sede de la ONU en Puerto Príncipe, el Parlamento de Haití y la catedral o Palacio Nacional, sede de la Presidencia. Más de 100.000 casas se hunden, así como la mitad de los hospitales, y casi el 80% de las escuelas resultan dañadas o demolidas.

Este espacio pretende recrear la experiencia del terremoto a través de proyecciones y de una plataforma móvil. También con un documental de Oriol Gispert, donde varios testigos explican cómo vivieron los momentos de la catástrofe.

Primeras reacciones (vestíbulo)
¿Cómo se gestiona una emergencia? Este ámbito explica cuál fue la primera respuesta ante la catástrofe, que hizo posible desenterrar a muchos haitianos y les salvó la vida, que llegó gracias a la iniciativa de los propios ciudadanos.

Después del caos inicial, tanto el esfuerzo de los haitianos como la tarea de las agencias internacionales empezó a dar frutos: se calcula que más de 1.000 organizaciones de todo tipo y diferentes países suministraron ayuda humanitaria a la isla.

La respuesta humanitaria significó que 1.500.000 supervivientes fueran alojados en tiendas de campaña y distribuidos entre 1.300 campos de desplazados. Más de 4.000.000 de personas recibieron ayuda alimenticia y se suministró agua potable a más de 1.000.000 de haitianos. La atención básica de salud llegó al 90% de la población.

Movilización ciudadana e institucional: proyectos de rehabilitación (patio S.5)
La fase aguda de la emergencia haitiana ha sido más larga que en otras catástrofes. El elevado número de personas afectadas, la debilidad extrema de las instituciones, la complejidad geográfica, el complicado acceso a algunas zonas y la lentitud de las tareas de recuperación y rehabilitación han dificultado el despliegue de la ayuda, y muchos haitianos y haitianas dependen todavía hoy de la asistencia internacional.

En estas tareas han tenido un papel clave las ONG, y también la gran movilización de las instituciones y de la ciudadanía en nuestro país. En este sentido, la Obra Social ”la Caixa”, mediante el Programa de Cooperación Internacional, abrió una cuenta a favor de los damnificados por el terremoto de Haití que recaudó donaciones ciudadanas por valor de 3 millones de euros. En total, 60.000 ciudadanos hicieron aportaciones por un valor medio entorno a 50 euros. A estos se añadieron los 800.000 aportados por la entidad.

Una parte de estas aportaciones se canalizó en un primer momento para proyectos destinados a hacer frente a las necesidades más urgentes de la población haitiana en materia de salud, refugio, agua, saneamiento y alimentación. Es el caso del Proyecto Shelter de Acción Humanitaria sobre Alojamientos Temporales, que realizó la Cruz Roja en la región de Léogâne, y del que se beneficiaron 2.700 personas.

Una vez superada la primera fase de emergencia, se está apoyando proyectos destinados a contribuir a la reconstrucción de Haití, como los que desarrollan Intermón Oxfam en el valle de Artibonite y que tiene por objetivo fortalecer la producción de arroz en la zona, o el de Médicos Sin Fronteras, que lidera el proyecto de asistencia medicohumanitaria en el hospital público Saint Michel de Jacmel. En total, se han beneficiado 140.000 personas.

En este espacio se puede visitar un alojamiento temporal y, en su interior, las descripciones de los proyectos realizados con el apoyo de la Obra Social ”la Caixa” por Intermón Oxfam, Médicos Sin Fronteras, Cruz Roja, UNICEF y Cáritas, mediante las  fotografías de Emilio Morenatti y Marta Ramoneda.

El día a día de los haitianos: reportaje fotográfico (Sala 5)
Mediante unas cincuenta imágenes realizadas entre junio y octubre del 2010, los fotógrafos Morenatti y Ramoneda, que han visitado la zona dos veces, ofrecen una panorámica de la vida de los haitianos después de la tragedia.

Se pueden contemplar imágenes cotidianas que reflejan la precariedad del día a día de sus habitantes, la mayoría instalados en campos de refugiados, y también momentos concretos como la campaña electoral, la epidemia del cólera o las fuertes trombas de agua que afectaron a la población en octubre pasado.