jueves, 31 de marzo de 2011

Ian McEwan: «Nos salvará la codicia, no la virtud»


El escritor británico se acerca con humor e ironía al cambio climático en su última novela, «Solar»


Los ingleses, benditos sean, no solo saben reírse como (casi) nadie, sino que llevan unos cuantos decenios haciendo de esa risa algo perfectamente compatible con la literatura en mayúsculas. He aquí el humor como ilustre y distinguido lubricante narrativo y, ya puestos, como acompañamiento para convertir en digeribles temas que de otra manera lo serían un poco menos. Temas como, pongamos, el cambio climático, eje central en torno al que se articula «Solar» (Anagrama; Empùries en catalán), novela con la que el británico Ian McEwan (Aldershot, 1948) blande el humor y la sátira como machetes con los que penetrar en un universo repleto de «estadísticas, datos científicos y conflictos políticos».
 

Aún así, no todo es lo que parece. O eso es lo que intenta subrayar el autor de «Sábado». «No es realmente una novela cómica, aunque sí que hay varios pasajes cómicos», explica. De hecho, casi todo el humor de la novela está concentrado en el personaje de Michael Beard, un Premio Nobel de Física con más pasado que futuro en el que confluyen virtudes tan dispares como las de mujeriego, ladrón de teorías ajenas y mentiroso que, sin embargo, «está convencido de que puede cambiar el mundo». «El humor es una forma de hacer que el lector se vaya a la cama con un personaje que si viera por la calle haría que se cambiara de acera», apunta McEwan, de paso por Barcelona para participar en la sexta edición del festival literario Kosmópolis.

Del altruismo al miedo

Y el humor, añade, es la manera de atraer al lector a un campo minado de teorías y conflictos que, pese a todo, no admite broma alguna. «No intento enseñar a la gente cómo vivir, sino que reflexiono sobre un tema que tenemos que encarar con grandes dosis de altruismo», explica el autor de «Expiación» al tiempo que desvela que el personaje de Beard bien podría ser «el reflejo de la debacle de la Cumbre del Cambio Climático de Copenanghe de 2009».
El altruismo, sin embargo, no lo es todo. Es más: sostiene McEwan que, si tomamos como ejemplo la revolución industrial, el cambio climático no se resolverá con virtudes y buenismos, sino entre grandes dosis de temor, ambición y codicia. «La revolución industrial inglesa del siglo XVIII no fue impulsada precisamente por idealistas, sino por gente cínica, interesada y ambiciosa; es muy posible que sea este mismo tipo de gente el que nos vaya a salvar. Y si tenemos éxito no será porque seamos buenos, sino por el temor al cambio climático. Nos salvará el miedo y la codicia, no la virtud», señala un autor para que el resulta bastante razonable que, así como ha habido quien se ha enriquecido con el carbón y el petróleo, vaya a haber quien lo haga con las nuevas energías.

El papel del arte

De ese mirar al futuro con aire distraído y algo descreído surge también la idea de que la literatura y, por extensión, el arte, poco o nada puede hacer para cambiar el mundo. «No creo que la literatura sirva para cambiar el mundo —explica—. Como mucho, podemos aspirar a hacer una reflexión sobre nosotros mismos y ofrecer una visión que ayude a la gente a concienciarse, pero dudo que el arte pueda hacer mucho más», apunta.
Y por si acaso queda alguna duda, McEwan se lanza a ilustrar su tesis con un ejemplo extremadamente gráfico. «Mira cómo el “Guernica”, por ejemplo, nos habla de la barbarie de la guerra, pero no ha evitado que haya habido más guerras ni que veamos guernicas en los diarios prácticamente todas las semanas», explica.
Lo que sí que ha cambiado ha sido la idea que el escritor británico tenía de la energía nuclear. Así, después de tres años documentándose y recopilando información para escribir «Solar», McEwan reconoce a regañadientes que la energía nuclear es necesaria. Al menos durante los próximos 30 o 40 años. «Si algo hay que aprender de lo ocurrido en Fukushima es que no se deben construir centrales donde se juntan dos placas tectónicas», asegura el escritor.

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