domingo, 20 de febrero de 2011

Irritación en los grandes centros culturales por el recorte de hasta el 20%

Antes de leer este artículo, unos cuantos datos:

El año pasado por primera vez en su historia LVMH facturó más de 20 mil millones de euros, con una subida del 19 por ciento respecto al año anterior. Los buenos resultados han acompañado también a los competidores del gigante mundial del lujo: Hermès subió sus ventas un 25 por ciento, hasta 2.400 millones de euros; Swatch, el líder mundial de la relojería, vendió 4.950 millones, o sea, un 19 por ciento más; un portavoz de Hugo Boss ha declarado que la firma alemana tuvo en 2010 “el mejor año de su historia”; Richemont, el holding propietario de Cartier, Piaget, Jaeger-LeCoultre y Montblanc, subió sus ventas un 33 por ciento en el último trimestre de 2010… Suma y sigue.

En medio de la profunda crisis que sacude a España, América Latina se ha convertido en un refugio para las grandes empresas de ese país.
Los mayores bancos españoles, Telefónica y Repsol están obteniendo ganancias en la región que superan holgadamente a las que les reportan las inversiones globales o la anémica economía nacional.
http://alternativalatinoamericana.blogspot.com/2010/08/bancos-y-empresas-espanolas-obtienen.html

Estaban avisados, pero no se esperaban que el recorte fuera tan alto: el 15% retroactivo a partir del 1 de enero. Los responsables de los centros culturales que dependen –en parte– de la Generalitat
no ocultaban ayer su descontento. Àlex Rigola, que asumió la dirección del Lliure tras la dimisión de Lluís Pasqual por falta de presupuesto, comentaba que “el nuevo Lliure ya nació con un presupuesto bajo, por lo que resulta muy difícil reducirlo más. Los gastos de la estructura teatral ya son los mínimos y sólo se puede recortar de los espectáculos que programamos, pero, si lo hacemos, incumpliremos nuestro cometido de dar espacio a las propuestas innovadoras, cuyo rendimiento no se puede calcular sólo en taquilla”. El recorte, ahora indicativo, se hará oficial cuando se aprueben los presupuestos.
El gerente del Macba, Joan Abellà, estaba desolado: “En dos años hemos perdido 2,1 millones de euros”. Tras el recorte del 2010, ahora el Ayuntamiento rebaja su aportación un 7,5%, el Ministerio de Cultura un 10% y la Generalitat, el 15%. El museo programa las exposiciones a 24 meses vista y el recorte obligará a dejar pendiente una muestra de gran formato que iba a revisar el arte de los años 80. “Gracias al convenio con la Caixa este año intentaremos aprovechar al máximo la exposición de nuestras propias colecciones, reducir actividades sin perder calidad, renunciar a dos de las cuatro muestras de la Capella, mantener las publicaciones sólo en formato on line y, como somos un servicio público, no tocar para nada los programas educativos y con las escuelas”.
Joan Abellà lamenta que el recorte se haya decidido sin contar con los afectados. “Si queremos fomentar la colaboración público- privado, echo de menos que no se hubieran hecho reuniones para decidir de forma conjunta qué se puede hacer para que la cultura no salga tan perjudicada. Tal vez es hora de replantearnos el modelo e ir hacia una economía de escala, por ejemplo, buscar juntos una salida a la crisis y hallar soluciones para mejorar los servicios de restauración, archivos, almacenamiento. No puede ser que asumamos pasivamente un recorte tras otro”.
La reacción más airada se produjo al otro lado de la plaza de Sant Jaume. Jordi Hereu le tenía ganas, por muchos motivos, a Ferran Mascarell y aprovechó la inauguración de un nuevo espacio del Museu Picasso para echar en cara al tantos años concejal de cultura socialista que, al estar ubicados la gran mayoría de equipamientos culturales en Barcelona, sea la ciudad quien “pague la crisis en solitario”. Hereu mostró su preocupación por si la Generalitat abandona el centro de arte contemporáneo que se construye en el antiguo Canòdrom.
Jordi Martí, delegado de Cultura, ironizó sobre el giro dado por Mascarell en pocos meses: “El recorte demuestra que la cultura no tiene el alto valor estratégico que Mascarell defendía hace poco, cuando abanderó el manifiesto del Cercle de Cultura. A nosotros también nos afecta la crisis y cuando nos tocó subir presupuestos, el de cultura subió más que el de otros sectores y cuando tocó reducirlos, fue a la que menos estrechamos el cinturón, porque nosotros sí consideramos la cultura como una prioridad estratégica. Y por si fuera poco, recortan el 36% su aportación al Grec de este año”, La Generalitat bajará de 495.000 a 320.000 euros su aportación al festival de verano barcelonés.
El recorte de Generalitat y Ministerio de Cultura en los consorcios de los que forma parte hace que el porcentaje de participación del Ayuntamiento se incremente. Según Martí, “si Mascarell propone un acuerdo cultural, tendría que haber hablado con los afectados, porque cada centro tiene sus especificidades”.
Mientras los directores del Palau de la Música y del Liceu se mantuvieron ayer mudos, Maite Ocaña, directora del MNAC (pierde 2,1 millones en dos años), lamentaba el recorte extra de 978.000 euros, de los que 200.000 irán a costa del personal. De seis exposiciones anuales pasa a tres. Aplaza al año que viene la muestra de numismática y recortará en actividades y catálogos. Ocaña dice que hay que adaptarse a la crisis y cree que los museos han de ir hacia la captación de recursos privados, aunque sabe que la crisis les deja con pocas opciones (el MNAC reúne ingresos propios por valor de 4 millones). El recorte afectará a detalles de las exposiciones sobre realismo, Torres Garcia y La maleta mexicana.

http://www.lavanguardia.es/cultura/20110218/54116734140/irritacion-en-los-grandes-centros-culturales-por-el-recorte-de-hasta-el-20.html

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